Normalmente, cuando vemos un álbum de fotos, siempre hay algún amigo o pariente que nos cuenta la típica historieta relacionada con la foto. Las abuelas y madres suelen ser las más activas en ese aspecto.
Pero si no os gusta contar una y otra vez la misma historia, siempre puedes hacer que una maquina la cuente. Sólo tienes que grabar la historia con tu voz, asociarla a una etiqueta, y pegar esa etiqueta a la foto. Cuando pases por la foto, lees la etiqueta con el escáner y empezará a reproducir el archivo de audio, que no es otro más que tu historia.
Y esto es ni más ni menos lo que hará el cacharro éste. Tiene una memoria para 500 historias o, lo que es lo mismo, fotos.
Y deja ya que tu abuela descanse la lengua
1 comentario:
ingenioso ya no hare si soy yo a los 4 años , yo.....jajajajajjaaja
saludos
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