TODOS TENEMOS UN PASADO

Channing Tatum: 'stripper'No se trata de una aventura anecdótica, Channing Tatum (Alabama, EE UU, 1980) se dedicó al 'striptease' a tiempo completo durante años. Fue con el nombre artístico de Chan Crawford. Cuando le invitaron a una “convención”, aceptó sin tener ni idea de de qué se trataba. “Era un espectáculo enorme con 50 o 70 'strippers' y 2.000 o 3.000 mujeres. Era una locura: se lanzaban a por mí, a tocarme, todas las noches”. Pero la historia más rocambolesca que a Tatum le gusta contar es la de la mujer que empezó a gritarle “¡me recuerdas a mi sobrino!” mientras le agarraba el culo. El padre de Tatum no tenía ni idea de esta aventura profesional. Se enteró viendo la televisión, cuando su hijo se lo contó a la famoso presentadora Ellen DeGeneres mientras promocionaba la película 'Magic Mike', un drama basado en sus propias experiencias como 'stripper' aunque lo pintaba mucho más divertido de lo que él reconoce que era. En la imagen, Channing Tatum en su época de 'stripper' en una foto publicada en Twitter.

Jay-Z: traficante de drogas
El músico, empresario y marido de Beyoncé, Jay-Z (Nuava York, EE UU, 1969), empezó a traficar con crack a los 14 años, aunque asegura que su única adicción era “la adrenalina, lo impredecible y lo peligroso de ese estilo de vida”. Hoy forma el matrimonio más poderoso de la industria del entretenimiento con Beyoncé y según él su gran fortuna se debe a su pasado como traficante. “De esa época aprendí a gestionar presupuestos”, asegura el ahora presidente de la compañía discográfica Roc Nation, “y todo gracias a haber traficado con drogas, porque tienes que controlar muy bien de números para triunfar en ese negocio”.

Coco Chanel: colaboradora de los nazis

A la diseñadora francesa Coco Chanel (Francia 1883-1971) no le hacía gracia tener que ceder su nombre al empresario judío Pierre Wertheimer a cambio de un mísero 10 % de los beneficios, así que la normativa impuesta por la ocupación nazi en Francia de que los judíos no podían poseer negocios le pareció una oportunidad fabulosa para recuperar su empresa. La desclasificación de archivos del gobierno francés en 2014 descubrió que Chanel colaboró con los nazis trasportando correspondencia y que incluso tenía su propio código como agente de comunicación. Su amistad con Winston Churchill la libró de ser juzgada tras la guerra y, ocho años después, reabrió su firma de moda y cambió la estética de la mujer en el siglo XX.

Al Pacino: prostituto

Sus dos mejores amigos, su padrino y su madre murieron en cuestión de un par de años, así que Al Pacino (Nueva York, 1940) se mudó a Sicilia, la tierra de sus antepasados, donde recuerda que solo tenía una baza para sobrevivir: “Mi cuerpo. A los 20 años, una mujer me daba comida y techo a cambio de sexo. Me despertaba cada mañana y no es que me quisiese demasiado a mí mismo”. Estas dificultades acabaron por empujarle a regresar a Nueva York, donde se propuso ser actor y debutó a los 27 años en el teatro. Cinco años después interpretó a Michael Corleone en 'El padrino' (su tercera película) y lideró la nueva generación de actores de método.

Matthew Broderick: provocó un accidente de coche que mató a una madre y a su hija

Durante unas vacaciones en Irlanda del Norte en 1987, el actor Matthew Broderick (Nueva York, 1962) y su novia de entonces (Jennifer Grey, famosa por protagonizar 'Dirty Dancing', que había conocido a Broderick durante el rodaje de 'Todo en un día') sufrieron un accidente de tráfico cuando el actor se puso a conducir por el carril derecho como si estuviera en una carretera americana. En el choque frontal con otro vehículo, dos mujeres fallecieron: madre e hija de 63 y 28 años. Pero Broderick adujo que no recordaba nada de lo que había hecho aquel día, ni siquiera haber salido de la cama. Solo tuvo que pagar una multa de 175 dólares (unos 140 euros). La hermana e hija de las fallecidas han tratado de quedar con Broderick para poder perdonarle en persona, pero él ha rechazado la propuesta. Lo que sí aceptó fue protagonizar un anuncio de coches para Honda en 2012, donde retomaba su personaje de Ferris Bueller de 'Todo en un día', por el que recibió un dineral y que los medios aprovecharon para desenterrar la escabrosa historia del accidente. Es el anuncio más comentado de Honda en toda su historia.

Whoopi Goldberg: adicta al crack

Una de las historias de superación favoritas de Hollywood: cuando Steven Spielberg contrató a Whoopi Goldberg (Nueva York, 1955) para 'El color púrpura', ella vivía en la calle y era adicta al crack. La actriz había trabajado como teleoperadora en una línea caliente y maquilladora de cadáveres, pero estaba tocando fondo cuando Spielberg le cambió la vida: Goldberg ganó una nominación al Oscar y se convirtió en la mujer favorita de EE UU durante varios años. Fue la segunda negra en ganar un Oscar (por 'Ghost', 51 años después que la primera mujer en conseguirlo, Hattie MacDaniel) y la actriz mejor pagada del mundo por 'Sister Act 2, de vuelta al convento'. Disney había tenido muchas reservas a la hora de contratarla para 'Sister Act' por su pasado en las calles, pero para la secuela ella tensó la cuerda hasta que le ofrecieron el sueldo más alto jamás recibido por una actriz: 12 millones de dólares (9,5 millones de euros). “Cada vez que decía que no”, recuerda, “Disney añadía un cero más al cheque”.

Brad Pitt: asistente de 'strippers'

El trabajo más popular de Brad Pitt (Oklahoma, EE UU, 1963) antes de convertirse en el mito erótico masculino oficial de los 90 es el de repartidor de panfletos para un restaurante llamado El Pollo Loco, para el cual llevaba un disfraz de... pollo loco. Pero también trabajó acompañando a 'strippers'. “Las llevaba en coche hasta la fiesta, ponía una cinta de Prince en el radiocassette, recolectaba el dinero y recogía la ropa de las chicas según se la iban quitando”, recuerda. Pero este trabajo, que él consideraba “deprimente”, le cambió la vida: una de las bailarinas le presentó a un profesor de interpretación que le ayudó a prepararse como actor. El resto es historia: del cine, de las carpetas de adolescentes y de la cultura pop.

Sylvester Stallone: actor de cine erótico

“Era hacer esa película o robar”, recuerda Sylvester Stallone (Nueva York, 1946). Y añade: “Estaba en un momento muy desesperado, así que en vez de hacer una locura preferí trabajar dos días por 200 dólares”. El trabajo fue participar en una película erótica llamada 'The Party at Kitty and Stud's'. Era 1970 y Stallone tenía 21 años y los bolsillos vacíos. Tras el éxito de 'Rocky' el filme fue relanzado como 'El semental italiano' (el apodo que recibe el boxeador en la película) y vendió miles de cintas de vídeo durante el reinado de Stallone como estrella del cine de acción en los 80.

Tim Allen: narcotraficante

En 1978, pillaron al actor y cómico Tim Allen (Colorado, EE UU, 1953) con medio kilo de cocaína en el aeropuerto de Michigan. Allen se declaró culpable y aportó nombres de otros narcotraficantes para librarse de la cadena perpetua. Tras pasar dos años en la cárcel, salió el libertad condicional y decidió que reírse de sus antecedentes penales le haría gracia a alguien. Tras trabajar los bares de monólogos cómicos, donde seguía abusando del alcohol, decidió desintoxicarse y pasarse a la televisión ('Un chapuzas en casa') y al cine ('¡Vaya Santa Claus!' y la saga 'Toy Story', donde dobla a Buzz Lightyear), que le han convertido en una de las estrellas familiares más entrañables de Hollywood. Pero el año pasado su apoyo público a Donald Trump y su comparación de Hollywood, donde según él se persigue a los conservadores, con la Alemania de los años 30 hizo que la prensa sacase a pasear de nuevo su pasado como narcotraficante.

Jackie Chan: actor porno
Jackie Chan (Hong Kong, 1954) nunca le ha dado demasiado importancia a la película porno que rodó cuando era joven, una de tantas cosas que tuvo que hacer para ganar dinero. Solo tenía un par de escenas en 'All In The Family' ('Todo queda en familia', título que da pistas sobre su argumento) y, según explica, “por aquel entonces las películas porno tenían muchos más diálogos que las actuales”. Efectivamente, ya no se hace cine como el de antes.

Samuel L. Jackson: pandillero y cabecilla de grupos violentos

En 1968, Samuel L. Jackson (Washington D. C., 1948), en su primer año de universidad, custodió el féretro de Martin Luther King. Un año después, participó en una protesta estudiantil que retuvo como rehenes a la junta directiva de su universidad, la histórica Moorhouse College. Uno de esos rehenes era el padre de Luther King. La institución accedió a sus exigencias (mayor representación negra en la cúpula directiva), pero expulsó a Samuel L. Jackson, quien se unió a pandillas callejeras y luego a los Panteras Negras en una serie de protestas violentas. Cuando su madre le convenció de abandonar el movimiento, Jackson regresó al Moorhouse College, pero se matriculó en arte dramático: había decidido que contribuiría a cambiar el mundo a través del cine. Hoy es el actor más taquillero de la historia.

Arnold Schwarzenegger: desnudos en revistas
Ganar el título de Míster Universo tres veces consecutivas le dio al culturista austriaco Arnold Schwarzenegger (Austria, 1947) un billete de avión a Estados Unidos, pero nada más. Para ganarse la vida, posó desnudo en varias publicaciones de culto al cuerpo masculino que, aunque no se anunciasen a sí mismas como tal, estaban destinadas al público homosexual. En concreto, la revista donde posó Schwarzenegger se llamaba 'After Dark', algo de lo que él no se ha avergonzado jamás: “Solo porque a un hombre le guste tener un cuerpo bonito no quiere decir que sea homosexual. Los gays tienen que luchar contra los mismos estereotipos que los culturistas y la gente tiene a confundir unas cosas con las otras”, explicó durante su campaña política a gobernador de California. Ganó las elecciones. Dos veces.

Cameron Diaz: ¿en una película porno?

Mucha gente (solo hay que mirar en Internet) ha asumido que Cameron Diaz (California, 1972), que hace unos días contó que estaba retirada del cine, hizo una película porno en sus inicios. No es cierto. Diaz posó para una sesión de fotos erótica cuando tenía 19 años en la que aparecía vestida de cuero, rodeada de cadenas y jugueteando con artilugios de sado. El fotógrafo grabó un “cómo se hizo” de la sesión y, cuando Diaz se convirtió en una estrella de la noche a la mañana gracias a 'La máscara', intentó editarlo en vídeo y comercializarlo como “una película erótica con Cameron Diaz”. Al haberse rodado sin conocimiento o consentimiento de la actriz, un juez impidió su publicación, pero no pudo detener el rumor de que Diaz trabajó como actriz porno. A veces, la imaginación resulta